Radio Victoria, 30 años. "Defendiendo el territorio y la comunicación comunitaria"

 

La Asociación de Periodistas de El Salvador (APES) comparte algunas recomendaciones sobre cómo realizar coberturas periodísticas éticas y responsables, que no alimentan la desinformación ni la histeria y el pánico colectivo y que está basado en el artículo «13 consejos de una edición de The Washington Post «, tomado del sitio: puroperiodismo.cl                                                                                                                                       

 

  • No dejar de escribir historias sobre el COVID-19
Aunque ya haya escrito por escrito sobre el tema «es crucial ser claro y minucioso» para entregar información.
Por eso, y aunque parezca a veces repetitivo, «es crucial ser claro y minucioso» para entregarles información.
 
  • Definir los términos en cada historia

Es importante traducir la jerga, algo esencial para las audiencias compuestas mejor un mensaje que suele ser muy técnico y que es relevante que incorpora en sus hábitos de higiene e incluso de interacción con otros.

  • Utilizar las redes sociales de manera efectiva
La gente requiere información confiable en este momento son los medios y sus reporteros los que la confiaron. Compartir por esa vía todas las historias que el periodista público.
 
  • Buscar información sólida de expertos en enfermedades infecciosas y salud pública

El gremio debe mantenerse alerta ante las personas que intentan venderse como expertos cuando no lo son. Es clave que los periodistas generan puentes entre la ciudadanía y fuentes serias y creíbles que aportan información certera y no solo opinología.

  • Cuando una información errónea se vuelve prominente, desmentirla inmediata y efectivamente

El periodista debe decir de inmediato que tal cosa falsa es falsa, especialmente en los encabezados. Proporciona una razón por la cual la falsedad se ha diseminado o por qué la gente podría creerla o por qué alguien la está promoviendo, para ayudar a las personas a entender por qué están viendo esta información errónea a pesar de que es falsa. Las historias que desmienten suelen ser las más efectivas si son simples y breves.

  • Evitar el balance falso

No es necesario contar algún “otro lado” del coronavirus cuando el otro lado es el ridículo.

  • Reconocer temores o incertidumbres puede calmar a los lectores

En lugar de decir “no te asustes”, mencionar que algunas personas están preocupadas, y eso es comprensible porque esta es una situación nueva y aún nadie sabe cómo terminará.

Pero luego de aquello, proporcionar la información confiable que de otro modo podrían no procesar por estar demasiado asustados.

  • Explicar lo que no sabemos
Las personas tienen muchas preguntas que aún no se pueden responder, ej.: qué tan infeccioso es este virus en personas que aún no muestran síntomas.
Es importante aclarar que aún no hay respuestas definitivas para todas las dudas, pero al mismo tiempo explicar que los investigadores están intentando responderlas urgentemente y contar qué se está haciendo para lograrlo .
  • Tener cuidado con señalar a “los otros” como población en riesgo

Se recomienda compartir la información sobre quién está en riesgo sin implicar que tienen la culpa o que no son parte de la audiencia.

  • Incluir contexto

Cuando sea apropiado, el periodista debe ayudar a los lectores a comprender cómo funciona el sistema de atención médica, cómo funciona la ciencia, cómo funcionan las publicaciones científicas, cómo funciona el sistema inmune o cómo funcionan los virus.

  • Entrevistar a enfermeras, enfermeros y otros profesionales pertinentes

Los periodistas suelen citar a los médicos en lugar de a las enfermeras como fuentes expertas, incluso cuando la experiencia y el conocimiento de las enfermeras es más relevante. Especialmente con el control de enfermedades infecciosas, las enfermeras pueden ofrecer información crítica y perspectiva.

Infografía: https://infogram.com/covid-19-como-reportear-sin-generar-panico-o-histeria-1ho16vr98wl74nq?live

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