Por Marixela Ramos*
En una fecha como esta, cuando se celebra a la periodista salvadoreña, y en un contexto como el actual, con un acceso a la información tan restringida y centralizada es importante rescatar y nombrar el gran aporte del periodismo comunitario, el periodismo desde el territorio, desde las voces más lejanas, donde los micrófonos y reflectores poco y nada logran alcanzar.
Por Leonel Herrera*
El 1 de junio el presidente ilegal anunció más “medicina amarga”, ahora en el ámbito económico. No detalló las medidas, ni a quienes serían aplicadas; sin embargo, la perspectiva derechista, el enfoque neoliberal y el carácter pro-oligárquico de su gobierno, hacían previsible que no sería para las élites pudientes, sino para los sectores populares y capas medias.
Por Leonel Herrera*
*Periodista y activista social.
El Juzgado de Primera Instancia de Sensuntepeque ha pasado a vista pública el “Caso Santa Marta” y manda a juicio a los cinco defensores ambientales. Así se impuso la injusticia, la cobardía y los intereses extractivistas.
En El Salvador se tuvieron logros significativos sobre el derecho humano a la comunicación antes de la llega del presidente NayibBukele al poder , como la reforma a ley de Telecomunicaciones el 5 de mayo de 2016, donde se dio reconocimiento a los medios comunitarios, un logro que fue posible después de años de lucha histórica de las radios comunitarias y las organizaciones sociales que con determinación promovieron y acompañaron este esfuerzo, es importante también resaltar que cinco años después las radios comunitarias para reivindicar este alcance histórico declararon simbólicamente el 5 de mayo como ”Día Nacional de los Medios Comunitarios” Para conmemorar y auto nombrar esta fecha y el compromiso del estado salvadoreño con los medios comunitarios. Pero, es importante señalar que en la actualidad, son enormes los retrocesos en materia del derecho humanos a la comunicación en el país, lo primero es, que, lo aprobado de la reforma no se ha implementado, además de un contexto hostil hacia la libertad de expresión, la ley de acceso a la información no se cumple, hay un cierre total a la información pública, persecución a la prensa critica, al periodismo alternativo a los medios independientes que no se alinean con la estrategia propagandística gubernamental, acompañado de un discurso de odio que domina el debate público, las últimas reformas a la ley de telecomunicaciones y a la ley de escuchas telefónicas prácticamente legaliza el espionaje, las reformas mordaza que se han aprobado en el marco del estado de excepción, por ejemplo, la reformas que se hicieron a la ley de preinscripción de pandillas y al código penal, donde, se establece como delito sancionado entre 10 a 15 años de cárcel al periodista o medio que publiquen información sobre las pandillas , es clarísima una ley mordaza y estos son retrocesos enormes.